¿Se respeta la libertad religiosa en Cuba?
Para el doctor en Ciencias Enrique Alemán Gutiérrez, presidente de la plataforma para el diálogo interreligioso y director de la institución y proyecto socio-cultural Cabildo Quisicuaba, Cuba respeta la libertad religiosa como derecho humano universal
Para el doctor en Ciencias Enrique Alemán Gutiérrez, presidente de la plataforma para el diálogo interreligioso y director de la institución y proyecto socio-cultural Cabildo Quisicuaba, Cuba respeta la libertad religiosa como derecho humano universal.
En la disertación realizada en el V Congreso Internacional, Diálogos en torno a los derechos humanos, celebrado en la Universidad de La Habana del 7 al 9 de diciembre, el también diputado argumentó su tesis a partir de lo refrendado en la Constitución aprobada en el año 2019, en varios de sus artículos, en los que el Estado reconoce, respeta y garantiza la libertad religiosa.
«Son innumerables las instituciones religiosas inscriptas en el registro de asociaciones de la República de Cuba. Hablamos de 651 de ellas y de 1 562 instituciones fraternales. De ese total, el 50 % han sido inscriptas y reconocidas después del triunfo de la Revolución», precisó el profesor Alemán Gutiérrez.
Expuso que desde el IV Congreso del Partido Comunista de Cuba, celebrado en 1991, se aprobó la admisión de creyentes en las filas de esa organización política. En 1992 se eliminó de la letra de la Constitución toda mención al ateísmo científico, lo que cambió la concepción de un Estado ateo a uno laico.
Además, desde 1988 se realiza la asistencia religiosa a los reclusos de forma individual. A partir del año 2008, en los establecimientos penitenciarios se celebran actividades litúrgicas y colectivas, con misas y cultos. Sesionan también en la isla caribeña múltiples eventos religiosos con presencia de líderes extranjeros, y en 2022, se han otorgado más de 7 000 visas religiosas. «Muchos de estos líderes han sido recibidos por autoridades gubernamentales. Recordamos el encuentro del General de Ejército Raúl Castro Ruz con el Patriarca Kirill».
Explicó, que como política imperial, para dividir al pueblo y balcanizar el credo, hay muchos grupos religiosos inducidos desde el exterior, que no son ni tan religiosos ni tan de nueva formación. «Nuestro país posee una amplísima gama religiosa, cada una de ellas caracterizada por sus presupuestos muy específicos, con puntos comunes de encuentro. Por eso hablamos de sincretismo religioso».
Para Alemán Gutiérrez, es una injusticia la inclusión de Cuba en una unilateral y espuria lista, confeccionada por la Casa Blanca, como país que no respeta la libertad religiosa. Él sostiene que en Cuba existe una violación de ese tipo desde hace seis décadas y se llama bloqueo.
«Por esa política hostil se le impide a nuestra contraparte en EE. UU. visitarnos, que no recibamos las remesas de nuestras instituciones desde el exterior, que los fondos destinados para programas sociales en Cuba sean incautados por la Oficina del Tesoro, que las personas con interés de visitarnos con visa religiosa tengan que viajar a terceros y cuartos países, simulando un viaje de turismo que no existe; que a nuestras contrapartes no se les otorgue visa para entrar a Estados Unidos. Se nos impide la importación y la utilización de las navieras para hacer llegar a Cuba donativos, entre otras prohibiciones», sentenció el profesor Alemán Gutiérrez.
En su opinión, estas verdades deben expresarlas las mujeres y los hombres de fe de Cuba y del mundo, para acabar con una de las tantas injusticias cometidas por el Gobierno de Estados Unidos, lo cual conlleva más sanciones contra la Mayor de las Antillas.