Estados Unidos pretende interferir justicia en Cuba al adoptar medidas contra funcionarios cubanos
El Secretario de Estado de los Estados Unidos Antony J. Blinken dio a conocer nuevas medidas contra Cuba en un comunicado emitido esta tarde en Washington. Las mismas van dirigidas a establecer restricciones de visas a ocho funcionarios cubanos supuestamente implicados en la detención y procesamiento judicial de participantes en los hechos violentos del 11 de julio de 2021 en algunas localidades del país.
El Departamento de Estado dice que aplicó estas medidas individualizadas en el marco de la Proclama Presidencial 5377, que suspende la posibilidad de que funcionarios y empleados del Gobierno cubano ingresen a los Estados Unidos como no inmigrantes.
Aduce que las mismas se toman «debido a las condenas severas e injustas que se impusieron a manifestantes pacíficos» y remarcan que » Estas acciones potencian el impacto de cuatro sanciones del Departamento del Tesoro que se aprobaron desde el 11 de julio, y el anuncio que el Departamento de Estado emitió el 30 de noviembre sobre restricciones a visas impuestas a nueve funcionarios cubanos en relación con la represión de activistas el 15 de noviembre.»
La medida anunciada es, sin dudas, un nuevo intento del gobierno estadounidense de interferir en los asuntos internos de Cuba, tratar de mediatizar la impartición de justicia en el país e intentar proteger a los elementos que, en buena parte financiados por Washington, pretenden subvertir el orden político y social de Cuba.
La decisión se da a conocer en un día en que Estados Unidos y su gobierno han reclamado medidas ejemplarizantes contra quienes organizaron y ejecutaron los hechos violentos en el Capitolio de Washington el 6 de enero de 2020; por los cuales han sido procesados más de 700 personas y algunas han recibido condenas superiores a los 20 años de prisión.