Cuando de la mujer cubana se trata (+Audio)
Hace solamente unos días meditaba en silencio sobre el impresionante protagonismo de la mujer cubana en nuestra sociedad. Me vi compulsado a hacerlo mientras una de ellas me inoculaba el candidato vacunal Abdala.
Albergaba mucha expectativa; era un gran acontecimiento alrededor del cual tenía múltiples interrogantes y, como en tantas cosas, allí estaba frente a mí el rostro dulce y sonriente de una mujer con la misión de protegerme.
Son innumerables las esferas donde la mujer cubana ha tenido una participación protagónica, ya sea en sus puestos laborales o asegurando servicios y producciones, pero la actitud valiente que ha mantenido la mujer durante la pandemia, pareciera resumirlas a todas.
Entre ellas hay doctoras, enfermeras, científicas, que no descansan en la más dura batalla de nuestros tiempos, pero también deportistas, educadoras, comunicadoras, amas de casa, mujeres todas, que constituyen verdaderos íconos de entrega, voluntad y compromiso.
Y no piense que me olvidaba de ese otro protagonismo, el de casa; diario, cotidiano, también heroico, para hacernos la vida más agradable en medio de tantas limitaciones.
Creo que en nuestro país existe un verdadero y sincero consenso en el reconocimiento a la mujer. No por gusto son mayoría en nuestro Parlamento y es más fácil enumerar dónde no tienen presencia que en donde sí.
Ya le comentaba que me impresionó aquella mujer, que con una jeringuilla en manos y una amplia sonrisa en los labios, sin decir una sola palabra, me trasmitía confianza, tranquilidad, esperanza; y que también motivo este reconocimiento que llevamos todos a flor de labios, cuando de la mujer cubana se trata.
