El «Sandino»» cumplió 55 años
El 8 de enero de 1966 el sueño se hizo realidad. Con un éxito de Centrales sobre Industriales, 4 a 3, que constituyó la primera sonrisa de Rolando Macías en series nacionales, la» entonces capital de la antigua provincia de Las Villas comenzó a disfrutar de su anhelado parque beisbolero. Muchas de las estrellas de nuestro pasatiempo nacional favorito se consagraron en esta instalación, como Aquino Abreu, Lázaro Pérez, Silvio Montejo, Rolando Macías, José Antonio Huelga, Antonio Muñoz, Pedro Jova, Alberto Martínez, Pedro José Cheíto Rodríguez, Roberto Ramos, Víctor Mesa, Lourdes Gourriel, José Ramón Riscart, Rolando Arrojo, Amado Zamora, Ariel Pestano, Eduardo Paret y Ariel Borrero, entre otros ilustres peloteros de la zona central. Por ese terreno han pasado los astros de los 60 clásicos nacionales celebrados hasta el momento y algunos de los buenos jugadores internacionales de cuando el béisbol todavía llevaba el apellido amateur. Entre estos últimos recordamos al sobresaliente receptor panameño Ruperto Cooper, el colombiano Orlando Ramírez, el lanzador puertorriqueño Rogelio Negrón, el jonronero nicaragüense Ernesto López, y los estadounidenses Joe Carter, Terry Francona y Ken Dayley, además de la selección japonesa que realizó una gira por nuestro país en 1974. Once desafíos correspondientes a los campeonatos mundiales de 1971 (6) y 1973 (5), y dos Copas José Antonio Huelga (1984 y 1994) tuvieron como escenario el coloso santaclareño. En 1979, en el único partido de» la IV Copa Intercontinental efectuado en el «Sandino»», Estados Unidos rivalizó con Nicaragua en lo que significó la primera presentación en Cuba de un equipo de béisbol aficionado norteamericano desde el certamen del orbe de 1942. Desde que Aquino Abreu dejó sin hits ni carreras al equipo de Occidentales, apenas transcurridos ocho días de su inauguración, hasta el partido de igual naturaleza rubricado el pasado 29 de diciembre por el camagüeyano Frank Madan, la instalación ha sido escenario de importantes momentos.
Además de Aquino y Madan, otros siete serpentineros han registrado similar hazaña en este estadio: el legendario José Antonio Huelga (1968), Alfredito García (1969), Nivaldo Pérez «primero frente al bate de aluminio en series selectivas (1979)», Mario Véliz (1982), Jorge Luis Valdés (1984), David Mena (2017) y Freddy Asiel Álvarez, único que ha logrado dos no hit no run en ese parque (2013 y 2019). El «Sandino»» fue testigo de las victorias número 100 de José Ramón Riscart, Rolando Arrojo y Freddy Asiel Álvarez, el hit 1000 de Rafael Orlando Acebey, Fausto Álvarez, Michel Perdomo y Andy Zamora, y los 2000 indiscutibles de Ariel Borrero. También, del arribo de Pedro José Cheíto Rodríguez, Michel Perdomo y Alfredo Despaigne a los 100 cuadrangulares, y de Orestes Kindelán a los 200 batazos de vuelta completa. Aquí ocurrió un hecho único en la pelota revolucionaria, cuando el 12 de noviembre de 1998, el antesalista villaclareño Rafael Orlando Acebey registró un triple play sin asistencia ante el plantel de Industriales. Igualmente se han registrado otros sucesos inéditos, como el caso del desaparecido inicialista Inocente Miranda, que el 11 de marzo de 1969 no sacó outs en un partido entre Las Villas y Habana. En el cuartel general de los anaranjados, en diciembre de 2006, durante la subserie Villa Clara-Matanzas, Yanet Moreno se convirtió en la primera mujer en actuar como árbitro en series nacionales, y el 13 de mayo de 1969 ocurrió la última presentación pública de Martín Dihigo «uno de los cuatro cubanos exaltados al Salón de la Fama de Cooperstown, Estados Unidos», al ser invitado a realizar el primer lanzamiento en un juego correspondiente a la II» Serie de las Estrellas (1969).
En este parque beisbolero los aficionados villareños disfrutaron el segundo de los tres títulos de los inolvidables Azucareros en la temporada de 1971. Luego de la división político-administrativa de 1976, los villaclareños vibraron de emoción con las coronaciones del elenco anaranjado en las campañas de 1993-1994, 1994-1995 y 2012-2013. Importantes figuras del ámbito» internacional ofrecieron conciertos en la mejor plaza del béisbol villaclareño, como el catalán Joan Manuel Serrat, los puertorriqueños Danny Rivera, Lucecita Benítez y Alberto Carrión, y la desaparecida cantante dominicana Sonia Silvestre. Cuatro veces visitó Fidel el recinto beisbolero, y en la segunda de ellas » actuó como bateador contra Aquino Abreu, el 6 de febrero de 1966. Reciente estaba la proeza de los dos cero hit cero carrera consecutivos lanzados por el estelar serpentinero. Durante su actuación como bateador, el Comandante en Jefe conectó roletazo al campo corto, machucón a segunda, un fly de foul, y al quinto lanzamiento disparó hit al jardín central. Mostró su inconformidad con una bola pegada que el árbitro Mario Cossío decretó strike, y con rolling a la inicial finalizó su estancia en el cajón de bateo. Cuando terminó de batear, le puso la mano en el hombro a Aquino y en tono jocoso le dijo: «Ahora te puedes ir a bañar y a descansar, que ya te rompí el no hit no run»». El primer juego Como mencionamos anteriormente, correspondió a Centrales e Industriales ser los animadores del juego que dejó inaugurado el «Sandino»», el 8 de enero de 1966, el cual favoreció a los primeros, 4 carreras a 3, con crédito victorioso a la cuenta de Rolando Macías y revés de Manuel Hurtado, uno de los cuatro tiradores empleados por el mentor Ramón Carneado. Los triunfadores alinearon con Juan Canillita Díaz (CF), Juan Mirabal (1B), Ricardo Mesa (RF), Erwin Walters (LF), Mariano Álvarez (2B), Owen Blandino (3B), Ramón Fernández (SS), Jesús Oviedo (C) y Rolando Macías (L). Mientras que por Industriales entraron en acción Tony González (SS), Antonio Ãico Jiménez (LF), Urbano González (3B), Osvaldo Toledo (1B), Ángel Fuentes, (CF), Ángel Suárez, (RF), Eulalio Linares (2B), Jesús Jufré (C), los serpentineros Manuel Hurtado, Inocente Álvarez «hermano del destacado estadístico Arnelio Álvarez», Rolando Quicutis y Elpidio Páez, así como Lázaro Martínez, Euclides Hernández, Manuel Toledo, Agustín Marquetti, Germán Ãguila y Alejandro Martín.
