Mariposas de la media esponja
El abuelo de Emilio Comas Paret, quiso hacer un plato de categoría que incluyera la popular minuta de pescado. Se esforzó mucho, porque no quería dejar de usar la harina de Castilla, pero tampoco quería hacer el rebosado que se usaba en los puestos de ventas ambulantes. Como la minuta parece una mariposa, y como en cayo La Media Esponja hay una leyenda de que aparece una marina, la describen como una criatura que tiene colores y cuerpo igual que estos insectos terrestres, y hasta se le ven unas barbitas, así lo cuentan Juan Zumbón y toda su tripulación esponjera que están cansados de verla, en calma blanca, salir del agua, volar y luego zambullirse. Por todas esas coincidencias el abuelo Ladislao creó el plato «Mariposas de la Media Esponja». Esta es la receta: Se pueden usar cinco o seis minutas de mediano tamaño, de acuerdo a los comensales, y luego de lavarse bien se ponen a cocinar en una olla con agua, sal, pimienta negra molida, orégano, comino, ajo machacado en abundancia, dos hojas de laurel y un chorro de vinagre. Deben cocinarse a fuego lento y evitar que el pescado se rompa. Cuando esté cocido se saca con cuidado del caldo y se ponen a refrescar. Entonces se cuela el caldo, se enfría y luego se le añade una taza de leche, dos yemas de huevo y un poco de aceite vegetal. Todo se pone a cocinar a fuego muy lento. Esta mezcla no debe hervir porque se corta. Cuando esté bien caliente se le agrega dos cucharadas de maicena que antes ha sido desleída en un vaso de agua. Todo se deja cocer a fuego lento y se revuelve hasta que espese. Debe entonces probarse el punto de sal y de pimienta, y subirlo si fuera necesario, pues esta salsa debe quedar bien condimentada. Se pone el pescado en una fuente y encima se le vierte la salsa que previo se ha refrescado. Se debe servir frío y acompañado de vegetales o viandas fritas. Lo cierto es que el plato Mariposas de la Media Esponja tiene un exquisito sabor a Caibarién. Fuente: -Versionado del libro «La heráldica, los blasones y las recetas marineras afrodisíacas» de Emilio Comas Paret.