Vacuna Quimi-Vio: más allá de la noticia
A inicios de este julio se conoció la noticia y tuvo en el país una abundante cobertura por los medios de prensa digitales y convencionales.
La vacuna antineumocócica conjugada cubana Quimi-Vio, a cargo del Instituto Finlay de Vacunas (IFV), había obtenido el registro sanitario del Centro para el Control Estatal de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos (CECMED).
Tal registro de la entidad reguladora fue conferido luego de los ensayos clínicos requeridos, que demostraron, con abundantes evidencias, la calidad, seguridad y eficacia del medicamento, cuyo proyecto tuvo sus inicios en 2012.
Imagen: tomada de PL
También el Presidente de la república se hizo eco del suceso, felicitando desde su cuenta en la red social X a los científicos del Finlay que, como resultado de 15 años de trabajo, desarrollaron el inyectable Quimi-Vio contra enfermedades respiratorias: “Gracias al equipo que hizo realidad el sueño», escribió el mandatario.
Pero es muy importante entender el acontecimiento más allá de lo coyuntural de la noticia porque su mayor repercusión está en el beneficio a las vidas de los niños cubanos y de otras latitudes considerando la morbilidad de las enfermedades respiratorias y la mortalidad infantil por infecciones.
El Director General del Instituto Finlay, Doctor Vicente Vérez Bencomo, todo un campeón de las ciencias en Cuba, comentaba a la televisión cubana https://www.youtube.com/watch?v=TX-ZXXebou4 a propósito de los beneficios de esta vacuna antineumocócica cubana:
Dr. Bencomo. Foto: tomada del perfil de Facebook del IFV
“El neumococo está asociado con la neumonía, con la meningitis, con la sepsis, con la otitis media. O sea, que realmente es una bacteria que causa una parte importante de estas enfermedades. Además, es una bacteria que tiene una diversidad importante, de ahí que la vacuna tenga varios serotipos, lo cual hace que que sea más compleja”.
Foto: captura de pantalla CVI
En realidad, se trata de la vacuna más compleja elaborada en laboratorios cubanos. Así lo ratificaba la Directora de Investigaciones del IFV, Doctora Dagmar García, al insistir en que “es un producto de siete cero tipos y nosotros estamos ya trabajando en un candidato de 11 serotipos, que debe estar en fase clínica en población lactante en los próximos meses, y tenemos la gran responsabilidad de ir desarrollando nuevas generaciones de productos”.
Dra. Dagmar García. Foto: captura de pantalla CVI
Además de su venidero impacto a favor de la salud de tantos, esta vacuna cubana, que se suma al exitoso quehacer cubano en este campo –Soberana, Abdala y otras hablan por sí solas- habla también del nivel y el rigor alcanzado por los científicos de esta Isla.
A favor de las garantías y eficacia de este nuevo inyectable se apunta lo demostrado a partir de su aplicación a nivel comunitario: al año, de ser aplicada en menores, habían disminuido significativamente las hospitalizaciones por enfermedades respiratorias.
La propia doctora García al aportar detalles precisa que “fue en la provincia de Cienfuegos, en el año 2018- 2019 nosotros también hicimos un ensayo clínico comunitario, que vacunamos el 93 % de todos los niños entre 1 y 5 años de edad, y al año de haberlos vacunados se observó un 63% de reducción de las tasas de hospitalizaciones por enfermedad respiratoria en la provincia”.
Durante tres semanas se vacunaron con Quimi-Vio más de 7500 niños con enfermedades crónicas. Foto: Instituto Finlay de Vacunas/ tomada de portal-cuba.com
En total, el desarrollo implicó 8 ensayos clínicos que alcanzaron a unos 37 mil niños y duraron del 2012 al 2023. Otros estudios epidemiológicos y fármaco-económicos igual fueron parte de la evidencia necesaria para el registro, como recordaba esta Doctora en Ciencias Farmacéuticas.
Ya desde el año 2022, en un Llamamiento urgente de la OMS para mejorar el uso de las vacunas existentes y desarrollar otras para luchar contra la resistencia a los antimicrobianos , la Organización Mundial de la Salud (OMS) había incluido esta vacuna cubana en su primer informe sobre inmunógenos en desarrollo para prevenir infecciones causadas por bacterias resistentes a antimicrobianos.
Existían en ese listado 61 vacunas candidatas, en distintas fases de estudio, de las que apuntaban contra las bacterias consideradas como foco de atención para esa organización internacional.
Imagen: tomada de isglobal.org
Resultan de extrema importancia tales vacunas porque, cada año, ocurren cerca de 1,27 millones de muertes debidas a la resistencia antimicrobiana , la cual tiene lugar porque las bacterias, virus, hongos y parásitos cambian con el tiempo y no responden a los medicamentos.
Foto: captura de pantalla CVI
De ahí que la OMS insista en las vacunas como poderosas herramientas para prevenir infecciones y así frenar la propagación de infecciones resistentes a los antimicrobianos.
La inclusión de la vacuna Quimi-Vio, entonces en desarrollo, constituía ya un reconocimiento al talento y capacidad de los científicos cubanos y es hoy también un aval para el fármaco ya aprobado por el CECMED.
Sin dudas, como reza el lema que identifica al sitio web oficial del Instituto Finlay de Vacunas, se trata de: “La fuerza de un país. Más protegido, más inmune, más feliz”. Y los cubanos y el mundo todo lo agradecen.