Eliminan especie coral invasora que aparece por primera vez en aguas cubanas
Científicos cubanos erradican la primera aparición en el país de unomia stolonifera, una especie de coral invasora que fue descubierta en septiembre de 2022 en la Ensenada de Bacuranao.
La especie estaba confinada a un metro cuadrado de la pared del cangilón, a 11 metros de profundidad, fijada sobre una capa de alga roja calcárea incrustante.
La labor de investigadores de varias instituciones, grupos de buzos aficionados y pescadores, que intercambiaban información mediante la Red de Blanqueamiento del Centro de Investigaciones Marinas de la Universidad de La Habana, permitió desarrollar estudios hasta erradicar la especie el 13 de marzo de este año, por el peligro que supone para la salud de los arrecifes.
Según reportes preliminares del Bojeo de Cuba, la unomia no se observó en otras localidades de las aguas alrededor de Cuba, lo cual es una buena noticia.
La especie descubierta en aguas cubanas es un tipo de coral blando que fue introducido en Venezuela por un aficionado para ornamentar los acuarios marinos. Luego se liberó al medio para que se reprodujera y poder comercializarla, pero se convirtió en una plaga.
Desde el año 2000 ha colonizado casi 100 kilómetros de la costa caribeña de Venezuela, en el estado Aragua; el refugio Cuare, en el estado Falcón; y una gran porción del lecho marino en el Parque Nacional Mochima, donde está causando estragos en los ambientes marinos y suplantando a otras especies de coral.
Las colonias de esta especie, de color blanco-rosado y nativa del Océano Indo-Pacífico, tienen largos tentáculos contráctiles de tamaño variable, que extendidos puede medir entre unos 6 y 8 cm y retraídos apenas 2 o 3 cm. La larva de unomia es muy resistente, puede permanecer viable por más de 48 horas en el interior de una colonia, incluso fuera del agua y expuesta al sol.
Se disemina principalmente a través de las redes de los pescadores, en las anclas de los barcos y en el lastre de las embarcaciones que vienen de áreas infectadas. Puede establecerse y crecer como otros corales, a partir de fragmentos de la colonia.
Para eliminarla, la unomia tiene que ser cortada de raíz, y un buzo experto puede tardar alrededor de una hora para erradicar los ejemplares que crecen en un área de dos a tres metros cuadrados.
Aunque no se reporta su presencia en aguas cubanas actualmente, los científicos mantendrán una observación sistemática de los arrecifes, en especial entre La Habana y Matanzas, en el entorno del lugar del hallazgo, a fin de poder actuar con inmediatez en caso de que reaparezca.
(Con información de Redcien)