Mundial de boxeo: resurge oreja peluda del arbitraje
La oreja peluda de las injusticias arbitrales resurgió en el Campeonato Mundial de boxeo, que se disputa en Tashkent, la capital de Uzbekistán.
Todo marchaba sobre ruedas hasta este miércoles, cuando se celebraron los combates de cuartos de final, y Cuba vivió la eliminación de seis de sus 12 representantes que combatieron. Si parece obra de la casualidad que el reparto de victorias y derrotas haya sido parejo, sorprende mucho más que quienes salieron cabizbajos fueron los púgiles más experimentados de nuestra escuadra.
Personalmente no vi perder ni a Julio César La Cruz (92 kilogramos), ni a Arlen López (80 kg) ni a Roniel Iglesias (67), nuestros doble monarcas olímpicos.
Ni La Cruz ni Arlen estuvieron en sus mejores presentaciones, pero a ambos los vi superiores a sus respectivos rivales.
“La Sombra” tuvo que cambiar su acostumbrado estilo de entradas y salidas y meterse en la corta distancia porque su contrario le superaba en estatura y le ganó el primer asalto. Sin embargo, de ahí en adelante el capitán del buque insignia del deporte cubano mostró superioridad evidente, a pesar de no estar en su zona de confort.
A Arlen se le vio apático contra el chino, pero conectó los mejores golpes y tampoco mereció la derrota, a mi juicio.
Más escandalosa fue la eliminación de Roniel, porque el pinareño dominó a su oponente en los dos primeros asaltos y estuvo más flojo en el tercero. Aquí los jueces le vieron vencer 3-2, pero el observador y el consultante revirtieron la decisión.
Llamativamente, contra él y La Cruz sus contrarios eran de la nación sede, y también de manera llamativa, siempre se demoró en publicarse la votación en los asaltos 1 y 2, cuando en el resto de las carteleras esa información se ofreció de manera inmediata.
A pesar de todo eso, sacaron la cara por nuestra escuadra los más jóvenes, pues amén de Yoenlis Hernández (75) y Yosbany Veitía (54), los otros que estarán en semifinales son debutantes a este nivel: Alejandro Claro (48), Fernando Arzola (más de 92), Saidel Horta (57) y Erislandis Álvarez (60).
Si me apuran, Nelson Williams (86) también mereció asegurar un puesto en el podio de premiaciones, porque el árbitro le descontó un punto cuando metió la cabeza por segunda vez (siempre se debe advertir dos veces) mientras que a su rival le llamó la atención hasta en cinco ocasiones por agarrar, y nunca le amonestó. Como se sabe, esta amonestación influye en la votación del asalto, y a la postre marcó el veredicto final, que tampoco debió haber sido jamás 0-5.
El otro que ya había sido eliminado con anterioridad, Erislán Romero (51), sí fue superado en toda la línea por al anfitrión Hasanboy Dusmatov, que exhibió sobre el encerado porqué fue campeón olímpico y subtitular mundial.
Dejando lo pasado, en el horizonte Erislandis y Yoenlis son los únicos que tienen aparentemente combates sin grandes complicaciones en semis, pero visto lo visto, mejor no aventurarse.