Aspiraciones de un sector que defiende en las aulas la obra colectiva
La despedida del curso escolar 2023-2024 marcó una pauta para el sector educacional del Caibarién. No solo por acoger el acto provincial con que Villa Clara dijo adiós a esta etapa, sino porque esa selección respondió a la condición de Relevante con que fue evaluado el territorio. Desde la escuela primaria José Martí se oficializó el cierre del pasado curso, y comenzando septiembre, ya abrieron nuevamente las puertas las más de 20 instituciones educativas de la Villa Blanca.
Con varias pausas imprevistas, debido a eventos climatológicos y complicaciones con la situación electroenergética, se logró cumplir con los calendarios de clases y evaluaciones, y mantuvieron su vitalidad los 3 Círculos Infantiles, las primaria urbanas y rurales, las 3 Secundarias Básicas, el Preuniversitario Rubén Martínez Villena, las dos escuelas de la Enseñanza Técnico Profesional y la Escuela de Idiomas.
Las visitas de ayuda metodológica, los espacios de formación vocacional y la continuidad del Tercer Perfeccionamiento Educacional, destacaron entre las aristas del trabajo del sector en el 2024.
Otros momentos importantes del año que despedimos para docentes, pioneros y estudiantes en general, llegaron durante la visita del grupo técnico del programa Educa a tu hijo, que arribó en enero a los 32 años de creado; las actividades de la jornada ideológica Camilo-Che y los espacios extracurriculares que mostraron, en las comunidades, el talento de los pinos nuevos.
Pero, al cierre de una etapa, que solo es una pausa del curso 2024-2025, implica también nuevos retos. Entre los pendientes, la conclusión de inversiones y reparaciones pendientes, resultados en el aprendizaje y otras ambiciones de las que habla el Director general de educación en Caibarién, el máster en Ciencias Rafael Marín Reymond.
Aspiraciones de un sector que defiende en las aulas la obra colectiva, y en el que se depositan también los éxitos de este 2025.
Imagen: Archivo CMHS.
