Díaz-Canel: No se trata de una cacería de brujas, se trata de ordenar
Al intervenir ante los diputados reunidos en la comisión de Asuntos Económicos de la Asamblea Nacional, que abordó de manera crítica el proceso de bancarización, el presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez abordó temas medulares de la economía.
Dijo que para atender el tema de la bancarización se han creado grupos de trabajo a nivel municipal con carácter intersectorial que, a la vez, están abordando otras cuestiones como el déficit presupuestario, la evasión fiscal, las incorrectas relaciones entre el sector estatal y no estatal, y los ingresos y gastos del presupuesto, para lograr una solución integral a nuestros problemas.
Díaz-Canel reconoció que ha habido descontrol y contemplación, «y por eso se nos han acumulado muchos problemas».
En la economía cubana persisten problemas objetivos y subjetivos. Entre los objetivos, el mandatario destacó la falta de disponibilidad de divisas, que atenta contra la existencia de un mercado mayorista tanto para el Estado como para el sector no estatal.
«Prácticamente, las divisas que hoy entran al país las empleamos para adquirir alimentos, combustibles para la electricidad y algunos insumos para producir medicamentos», comentó.
Entre los problemas subjetivos, mencionó «la manera irresponsable con que un grupo de instituciones del Estado no cumplieron lo que debían hacer para atender todo esto».
Insistió en que no se trata de un proceso de cacería de brujas hacia una determinada forma de gestión o de propiedad.
«Aquí lo que estamos planteando es un ordenamiento para que haya la mayor cantidad de ofertas de bienes y servicios a adecuados precios para la población, y que todo el mundo aporte todo lo que tiene que aportar», afirmó.
Informe a la Comisión Económica de la Asamblea Nacional del Poder Popular sobre la marcha del proceso de Bancarización. Foto: Enrique González (Enro)/ Cubadebate.
Recordó que nuestro modelo económico tiene concebido un actor económico fundamental, que es la empresa estatal socialista.
«Pero –sostuvo– tanto el sector estatal como el no estatal tienen responsabilidades. Los dos tienen que trabajar en la legalidad y aportar con impuestos o tributos. Donde ha existido una desviación en una forma de gestión no estatal, detrás hay una entidad estatal que tiene relación con la misma».
Agregó que una prioridad de gobierno es la estabilización macroeconómica, programa en el que se recogen varios procesos. Además, se trabaja en el perfeccionamiento del sistema de dirección de la economía la asignación de divisas, atendiendo al proceso de descentralización de facultades.
Reiteró que se aprecian desviaciones y distorsiones dentro de la economía que deben erradicarse.
«Hay déficit presupuestario, evasión fiscal alta, una distorsión en los precios», dijo.
«Con la relación oferta-demanda, los precios pueden estar altos, pero hay precios muy por encima, porque hay especulación alrededor de esos precios, hay inflación, hay corrupción; manifestaciones de trabajo informal con alta tendencia a la evasión fiscal, desvinculación del estudio y el trabajo, y la situación de vulnerabilidad de las familias», añadió el mandatario cubano.
Al comentar sobre el déficit presupuestario, el mandatario reflexionó sobre la relevancia de las empresas estatales como principales contribuyentes a estos fondos. En este sentido, dijo que todavía hay un grupo de empresas estatales que operan con pérdidas, «y si tienen pérdidas no están haciendo su aporte. Las empresas estatales tienen que elaborar un programa para salir de esa situación deficitaria. Hemos visto entidades que el año pasado cerraron con una situación financiera y productiva muy desventajosa y hoy están en mejores condiciones».
Igualmente, llamó la atención sobre la poca cantidad de micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) estatales existentes. «¿Quién dijo que esta organización empresarial era solo para los privados?», cuestionó.
También comentó sobre los problemas de eficiencia aún presentes en el sistema empresarial estatal. «Muchas veces se le achaca eso a los precios, y se le sube entonces el precio al producto, pero… ¿Ha existido luego más producción? ¿Hemos dado mayor oferta a la población? El tema no es el precio, sino que hay que resolver los problemas estructurales que le afectan».
Más adelante, también advirtió sobre los pagos excesivos del sector estatal al sector no estatal. «Sabemos que hay dirigentes que, sin haber pasado por los mecanismos colegiados de dirección, han tomado la decisión de establecer contratos sin mirar los precios que le están proponiendo para resolver un problema, cogiendo dinero del presupuesto y llevándolo a gastos excesivos», alertó.
«Luego se comprueba que los trabajos no se hicieron, o se realizaron con mala calidad. O hubo corrupción o tráfico de influencias, y fue una persona que se atribuyó la responsabilidad de pagar a alguien que conocía».
Llamó la atención a los diputados sobre el elevado monto de multas que no se cobran, un hecho que afecta directamente a los presupuestos territoriales.
En otro momento de su diálogo con los parlamentarios, el también primer secretario del Partido Comunista de Cuba se refirió a la evasión fiscal en el sector no estatal. «Hasta hace unos días, el 70% de las cuentas fiscales de las formas no estatales no tenía depósitos».
En este sentido, dijo que cálculos preliminares indican que, si se cobraran bien los impuestos, la cifra deficitaria del Presupuesto «sería mucho más manejable. Las medidas que estamos tomando no son para hacer ningún daño, lo estamos haciendo para ordenar, para tener un país mejor. Estos presupuestos van directo a los programas sociales, que son unos 32 y que se mantienen a pesar de la compleja situación económica. Hay una vocación por solucionar los problemas de la gente».
Al comentar sobre el proceso de bancarización, acotó que existen dos problemas fundamentales: el exceso de dinero circulante que está en manos de muy pocos; y, a la vez, hay una demanda de efectivo dada la concentración del dinero físico en pocas personas que no retorna al banco.
«Aquí hay un grupo de causas, entre ellas que hay entidades estatales que no hacen los depósitos diarios de efectivo. Además, hay negocios privados que, como decíamos, no están depositando su dinero en las cuentas fiscales y, por tanto, tampoco va al banco».
«Sabemos que hay entidades de comercio estatales que aún no tienen implementadas las pasarelas de pago. Para lograr que entren esos dineros, todos los servicios que se presten tienen que estar bancarizados, tiene que haber una economía digital. Lo que no tiene sentido es que me paguen el salario en tarjeta magnética y que luego haya que ir a un cajero a sacar todo el dinero».
Reflexionó que según las encuestas, la familia invierte mayoritariamente el dinero en comida y transportes, por lo tanto, es allí donde primero hay que promover la bancarización. Todos los mercados agropecuarios y todas las formas de gestión que venden alimento deberían permitir el pago electrónico, pero solo el 48% de los mercados estatales estaba bancarizado y casi ninguno de los no estatales lo estaba.
También habló sobre la necesidad de atender de manera puntual este proceso de bancarización en el sector campesino, un segmento vulnerable de la población.
En su intervención, también se refirió a la importancia de apoyar la producción de alimentos en el país y garantizar la atención a las personas más vulnerables.