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Resfriado común: a la orden del día en estas últimas semanas

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Las manifestaciones clínicas típicas del resfriado común comprenden secreción y congestión nasal, dolor de garganta, estornudos, malestar general, tos y en ocasiones fiebre ligera

El resfriado común, también llamado resfriado, es una enfermedad infecciosa viral aguda que perturba especialmente al sistema respiratorio superior. Es una de los padecimientos más frecuentes en todo el mundo y es producida principalmente por rinovirus, aunque también pudieran ser sus autores otros virus como los virus de la gripe y los coronavirus. Las manifestaciones clínicas típicas del resfriado común comprenden secreción y congestión nasal, dolor de garganta, estornudos, malestar general, tos y en ocasiones fiebre ligera. Estos síntomas habitualmente duran entre una y dos semanas, aunque en algunos pacientes pueden durar por más tiempo.

El resfriado común se propaga fácilmente de individuo a individuo mediante del contacto directo con secreciones de garganta o nasales infectadas o de manera indirecta por medio de objetos contaminados. La prevención de esta enfermedad se centra en medidas higiénicas simples, como evitar el contacto cercano con personas enfermas, lavarse las manos con frecuencia y cubrirse la nariz y la boca al estornudar o toser. Aunque no hay un tratamiento específico para el resfriado común, las manifestaciones clínicas pudiesen aliviarse con medicinas de venta libre para la congestión y el dolor, así como con líquidos abundantes y descanso. En casos de complicaciones o en personas con un mayor riesgo de complicaciones, como los ancianos, los niños pequeños o aquellos con otras enfermedades, es sustancial buscar atención médica apropiada.

AVANCES

Durante las últimas décadas, los más recientes avances en la comprensión del sistema inmunológico y la biología viral han proyectado claridad sobre nuevas tácticas para la medicación en el resfriado común. Aunque todavía no hay un tratamiento concreto para suprimir el virus causante del resfriado, han sido desarrolladas terapias encaminadas a reducir la duración de la enfermedad y a aliviar los síntomas. Una de las áreas de investigación más promisorias se concentra en el perfeccionamiento de medicamentos antivirales específicos que operen contra los rinovirus y otros virus frecuentes que son causantes del resfriado.

Los medicamentos antivirales, como los inhibidores de la neuraminidasa empleados en el tratamiento de la gripe, han mostrado determinado valor en investigaciones preliminares en contra de los virus del resfriado. Estos medicamentos actúan interfiriendo con la facultad del virus para propagarse y replicarse en el cuerpo. No obstante, aún se precisa de más investigaciones para establecer su seguridad y eficacia en la terapéutica del resfriado común.

Conjuntamente con los antivirales, se están examinando otras estrategias terapéuticas, como los interferones y los agentes inmunomoduladores, que pudieran ayudar a reducir la gravedad de los síntomas y a articular la respuesta del sistema inmunológico frente al virus. Estos procedimientos terapéuticos tienen la capacidad de no solamente mejorar los síntomas del resfriado, sino, además, de reducir la transmisión a otras personas y acortar su duración.

Otra perspectiva innovadora en el tratamiento del resfriado común es el desarrollo de vacunas nasales que pudieran ayudar a prevenir la infección por rinovirus y distintos virus respiratorios. Estas vacunas, cuya administración es por aerosol nasal, estimulan una respuesta inmunológica específica en la mucosa nasal, donde suelen entrar en relación los virus del resfriado. Si bien todavía se encuentran en etapa de investigación, las vacunas nasales pudieran representar una prometedora herramienta para disminuir la gravedad y la incidencia del resfriado común con vistas al futuro.

Al mismo tiempo de los tratamientos farmacológicos, también se están explorando enfoques alternativos y complementarios para el manejo del resfriado común, como la terapia con la vitamina C, zinc y los extractos de hierbas, que han manifestado cierto grado de eficacia en determinados estudios. No obstante, se precisa de más investigación para precisar su impacto verdadero en el tratamiento y la prevención del resfriado.

Aunque aún no existe una curación definitiva para el resfriado común, los adelantos en las investigaciones están aportando nuevas guías sobre posibles enfoques terapéuticos que pudieran ayudar al tratamiento, a aliviar los síntomas, a reducir la duración de la enfermedad y a prevenir futuras infecciones. Con el paso del tiempo, es posible que estas investigaciones lleven al desarrollo de tratamientos más específicos y efectivos para esta enfermedad tan molesta y común.

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