Un compositor peculiar y amante de su cubanía, Gerardo Alfonso
Gerardo Alfonso ha sido fiel defensor de la sociedad, de los cubanos, su idiosincrasia
El movimiento de la Nueva Trova cubana que se ha venido desarrollando desde la década de los sesenta ha tenido diversos exponentes, que con sus letras, un tanto politizadas y progresistas, han reflejado una etapa importante de la Revolución, la sociedad y las costumbres del cubano, combinadas en muchas ocasiones por la música tradicional.
Algunos de los íconos de este movimiento han sido Silvio Rodríguez, Pablo Milanés, Noel Nicola, Eduardo Ramos…Pero hoy, nos acercaremos un poco a la obra de otro de sus integrantes, Gerardo Alfonso y lo qué ha significado para él, la música.
El autor de temas trascendentales como “Sábanas blancas”, “Yo te quería María, “El ilustrado caballero de Paris”, “El revolver”, “Son los sueños todavía”… ha cautivado con sus canciones a no pocos en sus conciertos.
Sus aportes en la fusión, el rock, el rap… no quedan atrás. Creó el ritmo guayasón, una mezcla de lo campesino con lo afrocubano que se convirtió en una de sus creaciones más representativas. Su música se ha insertado en documentales sobre La Habana, largometrajes, materiales audiovisuales, presentaciones de programas televisivos como el que condujera el reconocido historiador de La Habana Eusebio Leal Spengler (1942.2020) en “Andar La Habana”… Sus frases y reflexiones le brindan a su obra un valor peculiar acogido y marcado en su arte.
Gerardo Alfonso ha sido fiel defensor de la sociedad, de los cubanos, su idiosincrasia… Es por eso que queremos saber qué ha significado para él, ser músico.
A la verdad es que ser músico para mí es como ser humano, ser cubano, ser varón, ser negro, ser latino, caribeño –en fin– es inherente a mí, es más que un hecho cultural, es mi manera de existir, que en un principio —es decir— de bebé o muy pequeño no estaba de manifiesto, solo respiraba y degustaba la música hasta que muy temprano di con los instrumentos para expresarme, y desde entonces, con mucha dificultad he llevado esa condición adelante.
A Gerardo Alfonso le fluyen algunos temas más que otros a la hora de componer. “Los temas que me fluyen espontáneamente son en primer lugar los de amor, que incluye alabanza y defensa a la mujer, en segundo lugar los sociales y estos tienen muchos caminos, muchas vertientes, ej.: raciales, violencia social, deterioro o mejoría del entorno, los conflictos éticos en la sociedad y el individuo y miles de ramas que derivan de la sociedad. En tercero me place hacer temas alegóricos, estos me hacen disfrutar y fantasear placenteramente, ej.: “Como si fuera un gato», «Volando hacia la Luna», «El güije», «Nadie sabe lo que tiene» y muchos otros. Después hay temas que me proponen por encargo y si me gusta la temática, hago esas canciones inolvidables y trascendentales. Y así…”.
La 47 Semana de la Cultura de Plaza se estará celebrando hasta el 24 de marzo. ¿Crees que se deben organizar más eventos como estos para resaltar nuestra cultura?
Este evento de conversar con artistas deben ser amplificado para que tenga gran alcance, el pensamiento de los artistas en estos tiempos son muy necesarios para «corregir distorsiones».
Ojalá la palabra de todos los artistas se tenga en cuenta. En la más honesta libertad sería un motor muy importante para salir a flote. Pero tengo que decir como Caetano Veloso: «En otras palabras, yo soy muy romántico».
¿Cómo se inserta y relaciona tu familia en tu música?
Los tengo locos. Mis hijos son músico a partir de esa pasión infinita mía por la música, mi esposa ha desarrollado unas compuertas que abre y cierra a su antojo, asimilar mis nuevos temas y mis reflexiones sobre temas musicales míos o de todo lo que se me ocurra hablar. Así con sus compuertas, ella mantiene absoluta soberanía e independencia para que la música que viaja por el aire no le resulte invasiva a su tranquilidad y sus meditaciones.
¿Tus gustos favoritos? (tipos de comidas, postre, hobbie, color…
Mis gustos favoritos en cuanto ingerir alimentos son casi prohibitivos por mi salud. ¡Para qué contarte! Me embullo, los azúcares, las harinas, las grasas, etc. Todo lo criollo me amenaza. Y si a eso le sumas los precios, ¡¡pa´qué contarte!!
Mi hobbie hacer canciones, y el color es como el día de mi cumpleaños 1ro de noviembre, Día de Todos los Santos, y por tanto, me gustan todos los colores, depende del estado de ánimo, pero el azul de mar es muy cautivante.
Proyectos actuales
Sigo con el grupo que aparte de los músicos de siempre, los demás son fluctuantes, es decir vienen y van y además, tengo a mi hijo Tobías en el grupo. Él –incluso– me está haciendo la producción de mi último álbum «Diosas y Dioses» este es un proyecto del género o’changa que al igual que el guayasón son creados por mi hace mucho tiempo y desde entonces, los defiendo con la vida en la isla del son, la rumba, (y el reparto), es una tarea titánica, pero este tema es muy largo en sí mismo, necesitaría una entrevista solo para ellos.
¿De qué manera agradeces a la vida?
Primero: entre los millones de espermatozoides qué pudieron fecundar a mi mamá el que lo logró fue el que me trajo a la vida, con eso empezó la travesía con una madre que me dio desde la salud de su pecho (que es el alimento más seguro) hasta la educación, los buenos modales, cuidado y atención para que no se descarrile el tren etc. De ahí surgen las relaciones sociales, amistades compromisos, valores que ya vienen siendo independientes de mi hogar pero son herramientas de batalla y supervivencia. Hay algo que tiene que ver con el talento y creo que eso me lo brindó milagrosamente Dios, pero la personalidad, el carácter y esas cualidades se adquieren en el trayecto teniendo como base la educación primaria, hogar y escuela. Después te inculcan ideales a los que uno responde comprometiéndose como un juramento, y luego descubres que otros ideales con los que no te comprometiste nunca, también son importantes para otras personas. Si aprendes eso a tiempo, no se te van los humos para la cabeza y no te crees cosas, como que eres el elegido y eso. La vida con todo lo que te enseña: el amor, el odio, la libertad, la opresión, son caracteres de la humanidad qué ayudan a hacer el bien o el mal, y ahí, sabiendo sopesar lo que te conviene más está la clave del éxito. Éxito que no son premios ni riquezas, sino saber estar con tu alma y tu fe.
A eso le agradezco.