En manos campesinas, la clave para una producción suficiente
El sector cooperativo y campesino de Cuba sembrará la mayor cantidad de las 470 000 hectáreas de cultivos varios previstas en la campaña de frío, lo que contribuye hoy a reducir las importaciones de alimentos.
Ese compromiso lo ratificó la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP), en una sesión plenaria de la organización, que debatió la urgencia de producir más renglones del agro para abaratar sus precios.
El miembro del Buró Político y secretario de Organización del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, Roberto Morales Ojeda, encabezó la reunión y convidó a desplegar la inteligencia colectiva de ese gremio para revertir la situación económica actual.
Llamó al uso eficiente de los recursos que el país dispondrá para el sector agrícola, atendiendo a la necesidad de que la canasta familiar normada se asuma con más producción nacional, y que no dependa de importaciones.
El pleno de la ANAP instó, además, a hacer un uso eficiente de las tierras que el Ministerio de la Agricultura entregó en usufructo a campesinos y cooperativistas, así como al debido control de las cosechas.
En la cita, conducida por Rafael Santiesteban Pozo, presidente de la organización campesina, se exigió elevar la vigilancia en las áreas agrícolas y ganaderas, para enfrentar con mayor eficacia la actividad delictiva en las bases productivas.
Sobre ese propósito hubo consenso en que la prevención es fundamental para detener las cadenas delictivas que reducen los acopios de productos agrícolas y la carne del ganado, asunto que afecta al campesino, a su familia y a la población en general.