Requiere Ciego de Ávila potenciar producción agroalimentaria
Ciego de Ávila, 14 oct (ACN) Aun en medio de limitaciones financieras y de recursos en el país, existen potencialidades en los municipios de Morón y Ciego de Ávila para garantizar alimentos a sus habitantes, enfatizó este viernes en esta ciudad Salvador Valdés Mesa, vicepresidente de Cuba.
Valdés Mesa manifestó que en los momentos actuales cada localidad debe saber sus fortalezas reales en el sector agrícola para, a partir de ese balance, proyectar su desarrollo en busca de la soberanía alimentaria y así contribuir a la sustitución de importaciones.
Acompañado por Liván Izquierdo Alonso, miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC) y su primer secretario en la provincia de Ciego de Ávila, y de Hiorvanys Espinosa Pérez, vicegobernador a igual instancia, el vicepresidente reflexionó en lo necesario que resulta darle protagonismo a la producción nacional para sustentar parte de la canasta familiar normada, hoy montada prácticamente en la compra en el exterior.
La comida que se genere en el territorio nacional le ahorraría miles de dólares a la economía, que se pudieran emplear, por ejemplo, en la adquisición de tecnologías, pues mantener esa canasta familiar normada cuesta entre mil 500 y mil 600 millones de dólares, explicó Valdés Mesa, miembro del Buró Político del PCC.
Reconoció que Ciego de Ávila es fuerte en producciones agrícolas y con un peso importante en el balance de alimentos en el país, razón para que en los municipios se dé una atención priorizada a quienes saben aprovechar mejor la tierra.
Durante el intercambio que sostuvo con representantes de las estructuras del Gobierno, el Partido y otros organismos de la administración central del Estado en las ciudades de Morón y Ciego de Ávila, el vicepresidente cubano alertó de las deficiencias en el completamiento de las plantillas y la conformación de las 13 direcciones y los nueve departamentos con que deben contar las administraciones locales para fortalecer su autonomía.
La consolidación de la nueva estructura de estos órganos de gobierno en cada municipio, la celeridad y objetividad en la concertación y contratación de las producciones agrícolas y el control de los precios son prioridades en la agenda del Estado.