SNB: ¡Habrá clásico en semifinales!
Sancti Spíritus se batió a brazo partido, pero no pudo evitar la clasificación a semifinales de Industriales, por lo que enfrentará a Santiago de Cuba en el Clásico de la pelota cubana.
Los Gallos dieron tremenda batalla, pero terminaron siendo víctimas de sus propios errores, en un cruce marcado por los nervios, con dos equipos que hace rato no sabían lo que era estar entre los cuatro grandes de la pelota cubana.
Apoyados en sus veteranos ilustres, Yunier Mendoza y Frederich Cepeda, junto a Rodolexis Moreno (de 34-12, con 10 anotadas y cinco impulsadas) y Lázaro Fernández (23-11, tres anotadas, dos dobles y seis remolcadas) además de los brazos de Yankiel Mauri y Yaniesky Duardo, los espirituanos forzaron el séptimo choque.
Las palmas también para el jovencito Alex Guerra, quien lanzó una joya en el Latinoamericano pero no pudo hacerse justicia en el juego 7, y para el receptor Yadiel Guerra, que defendió con gallardía nada menos que el puesto del titular de la última selección Cuba, una posición clave para cualquier equipo.
No obstante, a los Gallos los mató sobre todo su inefectividad con corredores en posición anotadora. Llevaban de 52-1 hasta el primer capítulo del sexto encuentro, y aunque mejoraron en las entradas siguientes, en el séptimo volvieron a padecer del mismo mal.
De haberlo hecho mejor estarían en semifinales de la 62 Serie Nacional de Béisbol, porque Industriales dejó mucho que desear desde todo punto de vista.
Fue el peor cruce jugado en esta postemporada, hay que decirlo así, y probablemente también de los últimos años.
Los 27 errores cometidos (17 de los perdedores) hablan a las claras de la presión que sufrieron ambos planteles, y lo único rescatable en este sentido es que el elenco a la ofensiva siempre los supo aprovechar.
Particularmente los Azules vivieron una Odisea con el control de sus lanzadores (43 boletos), de los cuales solo Raymond Figueredo pudo avanzar una vez como abridor hasta el quinto episodio, y el héroe inesperado, el novato Rafael Perdomo, en el juego 7; protagonizaron demasiados malos corridos de base y mantuvieron contra viento y marea a peloteros en turnos importantes sin rendimiento.
Jorge Alomá y Yasmany Tomás se combinaron de 51-11, con apenas una carrera impulsada, y eso lastró la capacidad ofensiva de los Leones. El Tanque se esperaba que fuera la diferencia en este cruce y no lo fue, pese a un inicio prometedor. La muestra evidente fue que pasaron a Yosvany Peñalver para trabajarlo a él y en vez de imponer respeto, bateó para doble play.
Para lo que se viene Guillermo Carmona debería plantearse quitarles responsabilidad y subir a Alberto Calderón y Yasiel Santoya. Quizás con menos exigencia sobre sus hombros, Alomá y Tomás puedan dar un mayor aporte.
Personalmente no me gustó poner a abrir a Perdomo y le volvería a dar la bola a Marcos Ortega, quizás se haga justicia contra las Avispas. Lo cierto es que el alto mando capitalino tiene aprietos en el bullpen por la ausencia de Andy Vargas, quien quizás pueda reaparecer en semifinales para que el novato se mantenga como relevo intermedio, aunque lo ha hecho de maravillas todo el tiempo.
Con todo y sus desaciertos, fue un cruce emocionante y no se puede negar la entrega de todos los protagonistas.