De nuevo el turismo en la mirilla
Volver siempre sobre un tema te lleva al riesgo de repetirte y ese no es el objetivo que nos anima. La ratificación gubernamental de que Cuba persistirá en el desarrollo del turismo y el logro por estos días iniciales de mayo del primer millón de visitantes, nos hacen volver la mirada hacia la bien llamada industria del ocio.
Justo cuando transcurría la 41 Feria Internacional de Turismo FITCuba 2023, el titular del giro -Juan Carlos García Granda- confirmó la conquista de la cifra, y que para lograr la meta anual debe crecer hasta diciembre nada menos hasta 3 500 000.
A tal cuantía podría definirla con un grupo de adjetivos que sintetizaré, pero en realidad si nos atuviésemos a pronósticos más factibles quizás tal no debiese ser el nivel de clientes esperados. Conforme sucedió en 2022, en el presente el plan se nos antoja inalcanzable, siempre -y con el mayor de los respetos- teniendo en cuenta las fechas, los plazos y el panorama de dentro y fuera de fronteras.
Para empezar por casa, ya una vez controlada la pandemia y con la reactivación de la vida social y económica, el destino enfrenta el recrudecimiento diario del bloqueo económico, comercial y financiero, déficit de divisas, inflación desmesurada, guerra mediática aupada igualmente por Washington y dificultades variopintas que laceran la diaria convivencia del cubano.
Precisamente, para extraer del turismo los recursos financieros que ayuden a paliar parte de esos problemas y reanimen a otras industrias como la alimentaria, la rama de la recreación sigue siendo para la mayor de las Antillas un fuerte asidero.
Como nos cerraron al tránsito de los cruceros por la intromisión extraterritorial imperial, dependemos únicamente para el arribo de los viajeros de las aerolíneas, cuyo número urge crecer en cantidad y frecuencias. Por ello en la importante bolsa comercial recién finalizada se realizó una sesión aparte con 51 representantes de compañías aéreas. Hubo compromisos que avizoran más capacidades, más asientos…que toquen no solo la capital, sino también Varadero y el centro y oriente del país.
Necesitamos de tales conexiones para que los potenciales turistas entren en contacto con los atributos de la Isla: seguridad, estabilidad política, hospitalidad, pueblo alegre, cultura, historia, patrimonio, turismo de modalidades que van desde el tradicional sol y playa hasta el de recorridos, de salud y calidad de vida, ecoturismo y de aventuras.
Canadá se ha recuperado en su emisión de clientes, aunque no ha sucedido lo mismo con el Viejo Continente, donde la crisis económica, del petróleo y el conflicto bélico en la zona dan al traste con incrementos sin precedentes que sobresalieron en 2019, cuyas estadísticas en la esfera están ahí como muestra de lo que nos falta por avanzar y sobrepasar en materia del dinámico rubro, susceptible a cambios pero con gran capacidad de readaptarse y retomar la senda.
Desde el calendario precedente se venía hablando de que el 2023 sería el de la recuperación en la industria sin chimeneas, alta responsabilidad para una etapa, cuando desde antes no podría ni por asomo preverse los disímiles problemas en el Sistema Eléctrico Nacional y el retraso en la llegada de los buques con combustibles y también de alimentos.
Está claro que el caso de Cuba es singular: o sobrevivimos o sobrevivimos. No hay opción y solo quedan alternativas: todas las que haya a la mano para garantizar a la locomotora de la economía lo que necesita y esta a su vez derrame sus ingresos en el resto de los eslabones.
En la despedida de FITCuba se dio a conocer que justo dentro de un año acontecerá su edición 42 en Jardines del Rey, dedicada a Latinoamérica y el Caribe, en un acercamiento más estrecho a nuestro entorno geográfico natural donde las relaciones han ido en alza -se buscan más vacacionistas desde México, Argentina, Brasil y Colombia-, conforme ha sucedido con importantes naciones del primer mundo como Rusia y China.
Todavía estaban en el aire los ecos de la bolsa anual, cuando el viernes en la propia capital sesionó la reunión de ministros y ministras del Grupo de los 77 más China, a la cual asistió Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Primer Secretario del Comité Central del Comité Central del Partido y Presidente de la República de Cuba.
En esa oportunidad y en conferencia magistral, el miembro del Buró Político y primer ministro, Manuel Marrero Cruz, puso de relieve las bondades que distinguen a la ínsula en esa dirección y confirmó la recuperación turística sostenible tras la COVID-19, pero de un modo afín con el medio ambiente.
Cuba ha demostrado que tiene la capacidad para desenvolverse ante grandes desafíos y el 2023 constituye un escenario más para crecerse nuevamente.