Presidente de Brasil abre visita oficial a China
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, comienza hoy una visita oficial a China, que se espera impulse los nexos económico-comerciales y además tendrá en agenda el debate de temas globales como el conflicto Rusia-Ucrania.
Según lo previsto, el periplo arrancará por la municipalidad de Shanghái y allí el mandatario participará en la toma de posesión de su compatriota Dilma Rousseff al frente del Nuevo Banco de Desarrollo, establecido por los miembros del grupo Brics (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) para financiar proyectos de infraestructura.
La reunión con su homólogo anfitrión, Xi Jinping, será el viernes 14, ambos analizarán cuestiones bilaterales y una propuesta de Lula para que los dos países en conjunto sean mediadores en la búsqueda del fin del conflicto entre Rusia y Ucrania.
Al dignatario lo acompaña una amplia delegación de empresarios, pues el programa contempla el cierre de una veintena de acuerdos en diferentes sectores.
Igualmente, la prensa china habla de la posible incorporación de Brasil a la iniciativa de la Franja y la Ruta de la Seda, con lo cual sería el país número 22 de América Latina y El Caribe en dar ese paso.
Lula estará en el gigante asiático hasta el sábado. Su visita estaba planificada del 26 al 31 de marzo pasado, pero fue pospuesta luego de ser diagnosticado y hospitalizado con una bronconeumonía.
Cuando asumió la presidencia en enero pasado, Xi le expresó voluntad de fortalecer la alianza bilateral, y destacó que China y Brasil son grandes naciones en desarrollo con amplia influencia global e importantes mercados emergentes.
Mencionó los intereses compartidos y las responsabilidades comunes como socios estratégicos, así como el fluido dinamismo de las relaciones durante sus 48 años de establecidas.
Asimismo, abogó por dar continuidad a esa tendencia bajo el mandato de Lula y propuso ampliar la cooperación en beneficio de ambos países y sus pueblos.
La última visita a China de un dignatario brasileño fue en octubre de 2019, la desarrolló el expresidente Jair Bolsonaro con una agenda marcada por asuntos económicos y arrojó pactos en la agricultura e infraestructura.
No obstante, Beijing sostiene que su proyecto de la Franja y la Ruta tiene potencial para ampliar más la cooperación en esas áreas y otras como la construcción de satélites, inteligencia artificial, el despliegue de la ultrarrápida red 5G, turismo y deportes, entre otros.