El altruismo los une
En este Día del Trabajador Eléctrico, Cuba reconoce a quienes en las más adversas circunstancias «brillaron» por su entrega y compromiso
Cuando en las noches más oscuras y calurosas del pasado año 2022 muchos sufríamos los molestos apagones, a esas horas –e incluso a deshora– había cientos de trabajadores eléctricos que en toda la Isla tenían por casa su empresa o una termoeléctrica, donde no se dormía en busca de alternativas y soluciones.
Esos hombres y mujeres –no pocas veces, al cabo de extenuantes jornadas enfrentando averías imprevistas, metidos dentro de una caldera, o diseñando estrategias para no apagar servicios vitales como los hospitales y centros productivos– al retornar a sus hogares también sentían, en carne propia, las consecuencias del déficit de la generación eléctrica en el país.
Tal sacrificio merece no menos que el respeto y la admiración del pueblo. Además, fueron ellos los primeros en llegar a las provincias devastadas por el paso del huracán Ian, y los últimos en irse.
Fueron ellos los que levantaron postes del suelo en medio de las más complejas condiciones, y aun así, se las ingeniaron para devolver la luz y la esperanza en los sitios donde las «heridas» eran más profundas.
Tristemente dos de ellos se despidieron de sus familias como linieros y «regresaron» como héroes eternos, tras perder sus vidas en el cumplimiento del deber.
Otros eléctricos llegaron hasta zonas intrincadas o subieron a la montaña para instalar los paneles solares que garantizan ese servicio en viviendas aisladas; en tanto, en los laboratorios del sector los innovadores recuperaron cientos de equipos.
Por eso hoy, cuando se celebra el Día del Trabajador Eléctrico, Cuba reconoce a quienes en las más adversas circunstancias «brillaron» por su entrega y compromiso.