Qatar 2022: Unos cuartos de lujo
Quizás a priori el más desbalanceado sea el Marruecos-Portugal, pero ya los marroquíes demostraron que saben muy bien a lo que juegan y todavía se busca al delantero rival que logre quebrar su valla. Ni siquiera desde los 12 pasos lo consiguió España, así que esa es una baza importante.
No obstante, el agotamiento de haber jugado prórroga puede pasar factura a los africanos, que tampoco tienen ese fondo de armario como para recurrir con total garantía a sus suplentes, mientras que los lusos exhiben una plantilla que se dio el lujo de sentar (y no extrañar) al mismísimo Cristiano Ronaldo.
En cualquier caso, el enorme talento de los europeos tendrá que aflorar para vulnerar la férrea disciplina táctica de los marroquíes, que a la contra también son muy peligrosos.
El otro partido que se inclina un poco hacia un lado es el Brasil-Croacia, en buena medida también porque los croatas también tuvieron que jugar más de 120 minutos contra Japón para llegar a esta instancia. Solo un triunfo (ante Canadá) y tres empates muestran los europeos, con tan solo cinco dianas a favor y dos en contra.
No obstante, les va la vida en cada encuentro y para ganarles hay que sudar bien la camiseta. La velocidad del juego auriverde puede ser letal para la veteranía de los croatas, cuya experiencia mundialista puede acabar bruscamente si Neymar o Vinicius vienen especialmente motivados.
Apasionante debe ser el tope Inglaterra-Francia, dos de las selecciones que mayor ofensiva han mostrado en el certamen, con 12 goles los primeros (colíderes con Portugal) y nueve los segundos. En el caso de los ingleses el ataque ha sido mucho más repartido, mientras que los galos exhiben como estandarte al casi imparable Kylian Mbappé, máximo goleador con cinco tantos en cuatro partidos.
Precisamente esa será la principal tarea del conjunto de Gareth Southgate, aunque todos saben que Les Bleus son mucho más que Donatello. Sin embargo, los focos estarán en su batalla contra los gigantes (pero lentos) John Stones y Harry Maguire, y será clave la labor de contención que haría Kyle Walker, tanto por su banda como por el centro para intentar controlar al delantero francés, que el 20 de diciembre cumplirá 24 años.
De todas maneras, el propio Walker reconoció que centrarse demasiado en Mbappé puede ser fatal para los suyos, porque Francia tiene mucha pólvora arriba.
Por su parte, el Países Bajos-Argentina debe ser también delirante, con el duelo personal entre el jugador más alto del Mundial de Qatar, el arquero neerlandés Andries Noppert (2,03 metros), y uno de los más bajitos, el astro argentino Lionel Messi (1,69).
La diferencia de experiencia en cambio es enorme para el albiceleste, pues Noppert debutó internacionalmente con la Oranje precisamente en este torneo.
El equipo que dirige Louis van Gaal también ha estado bien de cara al arco, con ocho dianas en cuatro partidos, y esa debe ser su apuesta ante una zaga que ha ido de menos a más.
Tras la sorpresa contra Arabia Saudita, los argentinos decidieron demostrar por qué eran considerados a priori entre los grandes favoritos a alzar el trono, pero la verdadera primera prueba de fuego será este viernes.
Portugueses, brasileños, franceses y argentinos me parecen candidatos a protagonizar las semifinales, pero este Mundial ya nos dejó claro que no puede darse nada por sentado.