«Cuba entera está comprometida con Pinar del Río»
Por tercera ocasión en los últimos seis días, el Presidente del Consejo de Defensa Nacional, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, recorrió zonas de Pinar del Río afectadas por el huracán Ian, e intercambió con las autoridades del territorio y con el pueblo sobre la estrategia de recuperación
Por tercera ocasión en los últimos seis días, el Presidente del Consejo de Defensa Nacional, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, recorrió zonas de Pinar del Río afectadas por el huracán Ian, e intercambió con las autoridades del territorio y con el pueblo sobre la estrategia de recuperación.
En la Empresa Pesquera Industrial La Coloma (Epicol), la mayor de su tipo en el país, comprobó los enormes estragos causados por la fuerza del viento y un mar embravecido, en las líneas de producción, los almacenes, los centros de acopio y hasta en las embarcaciones que habían sido resguardadas en los refugios.
Solo en cubiertas, los daños se estiman en más de 10 000 metros cuadrados de techo, y también se reporta un total de 12 barcos hundidos, que en estos momentos se tratan de rescatar.
Díaz-Canel conoció que brigadas de varias entidades del Ministerio de la Industria Alimentaria apoyan las labores de recuperación, y que ya partieron hacia las zonas de pesca más de 20 embarcaciones, cuyas producciones se procesarán en las industrias de la Isla de la Juventud y Batabanó.
Laura Izquierdo García, directora de Epicol, estimó que para finales de la semana próxima pudiera activarse nuevamente la industria, a partir de una estrategia en la que se priorizan las acciones de higienización, el techado de las áreas más importantes, el restablecimiento de las líneas eléctricas internas y la puesta en marcha de grupos electrógenos.
«Todos los servicios que puedan darle a la gente, cualquier cosa que se pueda hacer desde cada centro de trabajo, hay que hacerla, para atender las necesidades comunitarias, a partir de las afectaciones tan grandes que han tenido».
A pesar de que la situación es compleja, afirmó que «estamos viviendo días difíciles, pero son también días heroicos».
UNIR TALENTOS Y BRAZOS, Y EMPEZAR A TRABAJAR
«Un huracán en pocas horas nos provoca destrozos que no es posible recuperar en ese mismo tiempo. Pero eso no nos puede derrotar. Lo que hay es que unir esfuerzos, talentos y brazos, y empezar a trabajar», advirtió el Presidente, y convocó a la movilización de la población en diferentes escenarios.
«Uno de ellos es el laboral, que los trabajadores se vayan incorporando a sus centros, los vayan recuperando y, desde ellos también le damos servicio, atención y facilidades a la comunidad.
«Otro elemento es la convocatoria a la movilización comunitaria, en aras de que las personas ayuden a trabajar, a retirar los escombros y apoyen el tercer elemento, que son las fuerzas especializadas que van llegando».
En intercambios con la población en plena calle de La Coloma, en dos escuelas convertidas en centros de evacuación, en el círculo infantil –base de la brigada artística Marta Machado, liderada por el artista de la plástica Alexis Leyva Machado (Kcho)–, Díaz-Canel explicó que a la provincia han ido arribando brigadas de linieros para rehabilitar las redes eléctricas y telefónicas, y hombres y medios de la Forestal, del Ministerio de la Construcción, del Grupo Empresarial Azcuba, de las Fuerzas Armadas Revolucionarias y del Ministerio del Interior, para la retirada de los árboles, el despeje de las vías y la higienización.
El Presidente del Consejo de Defensa Nacional alertó que, al faltar la electricidad en la mayoría de los lugares, las personas no pueden acceder a la radio o la televisión ni a los medios digitales.
Por tanto, insistió en que en todas las comunidades, en determinados horarios, se le debe informar a la gente por dónde marcha la recuperación, cuánto se ha avanzado, cuáles son las principales dificultades.
A tono con esa indicación, en una larga jornada de trabajo en territorio pinareño, él mismo conversó con la población. Explicó que en la medida en que vaya concluyendo la recuperación en otras provincias del occidente, que también fueron azotadas por Ian, seguirán llegando nuevas fuerzas y que, teniendo en cuenta la devastación, de los escasos recursos de que hoy se disponen se decidió destinar un refuerzo de alimentos a la población pinareña de las zonas afectadas.
Además, informó la buena nueva de que, a pesar de que los tendidos que enlazan este importante puerto pesquero con el Sistema Eléctrico Nacional tienen serias afectaciones, que tardarán en restablecerse, se instalará un grupo electrógeno como alternativa para suministrarles electricidad.
El Jefe de Estado cubano señaló que los pinareños no han estado solos en la adversidad, que, desde antes del paso del huracán, un miembro del Secretariado del Comité Central del Partido y un vice primer ministro han permanecido en la provincia acompañando el trabajo del Consejo de Defensa Provincial, y que, además, por su vasta experiencia ante este tipo de contingencias, se designó al general de cuerpo de ejército y miembro del Buró Político, Ramón Espinosa Martín, al frente de la recuperación acá.
«Cuba entera está comprometida con Pinar del Río para trabajar por esta provincia», aseguró.
Se detuvo para conversar también con los pobladores de la comunidad del kilómetro 21 y la del kilómetro 15. Dijo que todo lo que se haga tiene que quedar mejor que como estaba, y que esta es una provincia que ha sido muy golpeada por los ciclones, en la que persiste una deuda de más de 6 000 viviendas derrumbadas por eventos anteriores, que habrá que saldar en cuanto las condiciones económicas del país lo permitan.
LA MAYORÍA DE LA POBLACIÓN ESTÁ PARTICIPANDO
En el encuentro con cuadros de la provincia, del municipio de Pinar del Río y del consejo popular de La Coloma, el Primer Secretario del Comité Central del Partido reflexionó sobre las diferentes actitudes que adoptan las personas en una situación límite, como la del paso de un huracán categoría 3 que estuvo por muchas horas afectando directa e indirectamente el occidente de Cuba.
En estas circunstancias –señaló– hay una parte de la población que de inmediato se incorpora, empieza a recuperarse de los daños en su vivienda y después ayuda, combinando lo personal y lo social.
Hay otras personas que se aturden más, a las que cuesta más trabajo impulsarlas, pero que, poco a poco, cuando van viendo la incorporación de los demás, se van sumando.
También hay un grupo de personas que en la misma medida en que avanza la recuperación y ven que en otros lugares se va a más velocidad y en su zona no, empiezan a tener preocupaciones lógicas y hacen reclamaciones desde una posición cívica, desde posiciones de decencia.
Estas personas hacen manifestaciones lógicas, resultado de sus preocupaciones, y en estos casos –comentó Díaz-Canel– todos los dirigentes tenemos que estar en función de explicar.
Abundando en el comportamiento en situaciones extremas como un ciclón, el Primer Secretario también abordó la actitud de un grupo de personas que, independientemente de las afectaciones que tengan, hacen reclamos desde posiciones de incomprensión total, retando, ofendiendo… Y ¿a quiénes están ofendiendo?, a la misma gente que está en función de resolver esos problemas.
«¿Y cuál es la lógica de esa actitud, o a quién están sirviendo, a quién están convocando para que nos vengan a resolver los problemas, si están yendo directo contra la gente que está trabajando? Creo que sería más útil que, con todas esas preocupaciones que puedan tener, se pusieran a ayudar a los que están en los lugares trabajando.
«Manifestaciones de ese tipo no tienen legitimidad. La preocupación y el planteamiento honesto, decente, en medio de una situación difícil, lo aceptamos y lo atendemos, porque aquí la preocupación del país es cómo, de la manera más rápida posible, podemos resolver toda esta situación y mejorarla, pero estos que actúan de esa manera, que reclaman todos los derechos que da la Revolución, pero que aportan poco, esa actitud, hay que discutirla y enfrentarla con argumentos.
«Aquí hay que tener en cuenta que nosotros estamos construyendo una sociedad socialista con mucho trabajo, por un bloqueo que no nos deja avanzar en esa construcción socialista, pero una sociedad socialista se construye desde una centralidad en el trabajo, donde la gente aporta y recibe por lo que aporta. Hay mucha gente que cree que todo hay que dárselo, que todo hay que ponérselo en las manos, que todo hay que resolvérselo, pero ellos no participan».
Y dentro de ese grupo de personas –acotó Díaz-Canel– hay quienes están alentados por los odiadores, esos que en estos momentos están más preocupados por el avance de la recuperación en Cuba que por las afectaciones en otros lugares del área, también, golpeados por los ciclones en estos tiempos, y donde se avanza menos.
«Esas personas –denunció el Presidente de la República– se aprovechan de estas circunstancias para hacer otro tipo de expresiones, que son contrarrevolucionarias; tratan de cometer hechos vandálicos, como cerrar vías, tirar piedras contra instalaciones económicas o sociales; y ya eso se va de la ley.
Y esas situaciones –aclaró– se atenderán con el rigor de las leyes de nuestra sociedad que, desde la Constitución y desde el derecho, protegen la estabilidad de la población, la convivencia social adecuada, para que haya paz, armonía, para que entre todos podamos trabajar.
Hay gente que, lamentablemente, se ha manifestado así; son los menos, pero se han manifestado de esa manera, y sabemos todos los nexos que tienen con esa contrarrevolución que desde el exterior empieza a dictar cómo actuar y empieza a pagar ese comportamiento, acusó el Jefe de Estado.
Pero, pese a esas actitudes –señaló–, la mayoría de nuestra población en las áreas afectadas por el huracán Ian está incorporándose a la recuperación, participando, planteando preocupaciones y proponiendo cosas que se pueden mejorar.