Siembra tu pedacito, cosecha tus alimentos (+Audio)

Hoy, nuestro Portal Web estrena la sección «Siembra tu pedacito». Su título hace  deferencia al movimiento popular promovido por los Comités de Defensa de la Revolución (CDR) en Cuba y el Movimiento de la Agricultura Urbana, Suburbana y Familiar. Pretendemos convertirnos en motivación de las familias a  cultivar sus parcelas para el autoconsumo, bajo los términos de la agricultura ecológica resiliente.

Lo cierto es que podemos crear un huerto urbano, solo necesitamos un pequeño jardín, patio, terraza, azotea, balcón, o incluso en el alféizar de una ventana. Cultivar nuestras propias verduras y hortalizas, para luego disfrutar de sus frutos en la mesa es una experiencia única, económica y alcanzable por todos.

¿Por dónde comenzamos?

Si nos proponemos sembrar nuestro pedacito sólo existe un elemento indispensable, la luz solar directa. Los vegetales al igual que el resto de las plantas necesitan del Sol para obtener energía a través de la fotosíntesis. Entonces, en principio la mejor orientación será aquella que permita una buena cantidad de horas de luz directa.

En una vivienda con terreno pequeño podemos destinar una zona para nuestro huerto ecológico, delimitando el espacio y aportando al suelo abonos orgánicos que mejoren sus condiciones físico-químicas y su fertilidad. Pero, si no disponemos de un patio o parcela, podemos crear el huerto usando recipientes para el cultivo y sustratos orgánicos.

¿Cuáles recipientes podemos utilizar?

Las macetas se pueden construir con galones, botellas u otros recipientes vacíos de plástico. También muebles  viejos, rotos o en desuso que pueden servir de plataforma para montar un huerto urbano vertical; cajas de madera de las que se usan para transportar productos y que se botan; cualquier objeto bajo los preceptos de la imaginación puede convertirse en vasija para cultivar.

Lo más importante a la hora de elegir los recipientes es que permitan un mayor volumen de sustrato, en función del espacio disponible que tengamos. Es más importante la magnitud total que puede albergar nuestro huerto ecológico que la profundidad del depósito.

¿Qué tierra debemos emplear en el huerto ecológico?

Después de contar con los recipientes o áreas vacías para la siembra, el  paso siguiente es elegir la tierra en la que vamos a plantar las hortalizas y verduras de nuestro huerto ecológico. Lo más adecuado es usar sustratos orgánicos porque son ligeros y tienen una adecuada porosidad para que circule el aire y retener el agua y los nutrientes.

Estos requisitos los cumplen los sustratos orgánicos compostados, como el vermicompost (residuo orgánico digerido por la lombriz de California), que actuará además como abono al aportar todos los nutrientes que necesita la planta. Otro  sustrato que no aporta muchos nutrientes pero que tiene algunas de las propiedades mencionadas es la fibra de coco.

Por ello puede ser ideal componer nuestro sustrato combinando uno que aporte buenas condiciones estructurales (fibra de coco) y otro que actúe como abono aportando los nutrientes y las propiedades de la materia orgánica (vermicompost). Puedes mezclarlos en una proporción de 60% de fibra de coco y 40% de vermicompost.

En este punto vale destacar otra posibilidad: el compost obtenido con el reciclaje de materia orgánica de tu propio hogar. Aporta los nutrientes necesarios para que las plantas crezcan sanas y vigorosas, ofrece la oportunidad de reciclar los residuos orgánicos generados en casa y es gratis. Puedes instalar un pequeño cajón supletorio para hacer el vermicompostaje.

¿Cómo regar las plantas del huerto ecológico?

El riego es una cuestión esencial cuando deseamos cultivar, sobre todo si es en  recipientes, porque en estos el agua se agota con mayor facilidad que en el suelo. Así que debemos estar más pendientes del riego. Por otro lado, a veces, caemos en un exceso de agua que puede provocar un lavado, y por tanto pérdida de nutrientes fundamentales para la planta. Por este motivo, una de las tareas más importantes y donde tenemos que ser más precisos es en el riego. Hay que  mantener una humedad constante, ajustándola a la época del año y a las plantas  que estemos cultivando.

Podemos regar de forma manual, lo cual será un buen método sobre todo en pequeños huertos. Lo más adecuado, en este caso, es el uso de la regadera y hacer el riego poco a poco para evitar la formación de grietas en el sustrato. En cambio, si tenemos un huerto ecológico relativamente grande y sobre todo si en la época de verano recibimos mucha insolación, es de gran ayuda la instalación de un sistema de riego por goteo. El riego debe hacerse en horas tempranas de la mañana o en la tarde noche.

¿Cómo reproducir las plantas?

El último paso para nuestro huerto ecológico  es qué vamos a cultivar. Lo más importante es elegir plantas de temporada porque ahorramos agua, luz, y contribuiremos a mejorar la salud del huerto. Se pueden combinar distintos tipos de plantas, por ejemplo, aromáticas y flores junto a hortalizas y verduras.

Si tenemos dificultadas con las semillas podemos adquirirlas en la Granja Urbana, y  también con los productores experimentados de organopónicos, patios y parcelas. Otra opción, a partir del segundo año con huerto en casa, es obtener nuestras  propias semillas.

Por ahora solo me resta desearte mucha suerte en la siembra y buena cosecha en tu pedacito.  

Imágenes tomadas de Internet