Escenarios y retos del Sub-23 cubano
La selección cubana venció cómodamente a la de Alemania por 10-3, en un partido en el cual se esperaba una producción ofensiva más holgada ante la debilidad del pitcheo rival. Seis imparables cuentan solo uno más que el acumulado que se consiguió frente a Taipéi de China el sábado, cuando se alcanzó la apretada victoria por 2-1, gracias al kilométrico jonrón de Yuddiel González por el jardín central, en la quinta entrada.
En el partido con los teutones, los peloteros cubanos recibieron diez boletos, sin embargo, faltó hacer sonar el madero, pues, de la alineación antillana, cuatro se fueron sin poder marcar en el casillero de los indiscutibles.
Esa victoria en el campeonato mundial Sub-23, en Obregón, deja a la escuadra nacional con balance de 2-1, lo que debe mejorar en el choque de hoy ante la República Checa, para llegar al duelo del martes, frente a República Dominicana.
ESCENARIOS TRAS EL DESENLACE ANTE LOS DE QUISQUEYA
Lo primero sería dar por descontado que ni alemanes ni checos ganen más juegos, algo casi seguro. En ese caso, si el partido que se efectuaba al cierre de esta edición, entre México y Taipéi de China, quedara a favor de los anfitriones, y en el de hoy, si los dominicanos derrotaran a los asiáticos, cualquiera fuera el resultado del Cuba-República Dominicana, mandaría a esos dos conjuntos a la siguiente etapa, junto a México. Pero, en ese caso, la Mayor de las Antillas iría a la próxima fase con arrastre de cero victorias y dos derrotas.
Si Taipéi le ganara a los mexicanos y a los dominicanos, concluiría con 4-1 y, de esa manera, si los cubanos vencen a los de Quisqueya, cerrarían con 4-1 y avanzarían con 1-1, en compañía de los de Asia y los organizadores de la lid. Pero si caen, terminarían con 3-2, igual que los dominicanos y mexicanos, con un triple empate en el segundo puesto, mas Cuba habría perdido entonces con los otros dos de la trilogía y quedaría fuera.
EL RETO de LA DIGNIDAD
Otros tres peloteros de la selección cubana, el lanzador Dariel Fernández, y los jardineros Dismany Palacios y Reinaldo Lazaga, abandonaron a sus compañeros y el compromiso, contraído con su Patria, de representarla en un evento mundialista, dio a conocer la Federación Cubana de Béisbol (FCB).
Ellos se suman al receptor Loidel Rodríguez, y a los serpentineros Luis Dany Morales y Uber Mejías, quienes abandonaron el grupo. Estas, como las otras decisiones de jugadores cubanos, también es la consecuencia de la anulación del acuerdo entre la fcb y la mlb, que ha impedido realizar sueños por la vía natural, habilitada para el resto de los países, y estimula el tráfico de atletas en defensa de intereses políticos, ajenos al bienestar de la familia cubana.
El reto se vuelve mayor ahora. El deporte cubano, fruto de la conquista de su Revolución, ha sido capaz de levantarse y dar el jonrón en los momentos más difíciles. Lo hizo cuando, por solidaridad, no asistió a dos Juegos Olímpicos (1984 y 1988), y llegó a Barcelona para su mejor actuación histórica, lo logró en 1966 cuando decidió, si fuera preciso, llegar a nado a los Juegos Centroamericanos y del Caribe de San Juan, Puerto Rico, y lo acaba de hacer ahora, en los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Tokio, con una actuación de lujo, pese al recrudecimiento del bloqueo y de la pandemia.