Continuar haciendo ciencia en pos del desarrollo del país
«El diálogo directo entre la comunidad científica y el Gobierno no solo se va a mantener, sino que cada vez se ampliará y enriquecerá más»», aseguró el primer ministro, Manuel Marrero Cruz, al encabezar este lunes la reunión de trabajo del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma), en la cual se evaluaron los principales resultados obtenidos por el sector en 2020, así como las proyecciones que se han definido para 2021.
Ha sido un año muy duro, que nos ha demostrado lo crucial de aplicar la ciencia, la tecnología y la innovación en todo lo que hacemos como el mejor camino para encontrar solución a los actuales problemas, enfatizó el Jefe de Gobierno durante el intercambio, donde además estaban presentes la vice primera ministra Inés María Chapman Waugh, y la miembro del Secretariado del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, Olga Lida Tapia Iglesias.
Ha sido un año «dijo Marrero Cruz» en el que, a la par del enfrentamiento a la epidemia provocada por la COVID-19 en Cuba, se ha arreciado, constantemente, por parte del Gobierno de Estados Unidos, el injusto bloqueo económico, comercial y financiero, dos aspectos ante los cuales ha sido imprescindible la búsqueda de alternativas desde la ciencia, que permitan dar respuesta a las dificultades más acuciantes de la población.
Los resultados, aseguró, han sido contundentes. No obstante, llamó la atención sobre el hecho de convertir en una prioridad de trabajo la generalización de las soluciones que se obtienen, pues no basta con solo investigar e innovar.
Ante la creciente necesidad de continuar impulsando proyectos en sectores estratégicos, el Primer Ministro consideró que se requiere apoyarse más en la ciencia para potenciar, también, el desarrollo local y fortalecer el papel del municipio.
«Es vital desarrollar la ciencia, la tecnología y la innovación en lo local»», insistió. Ese vínculo, valoró, posibilitará definir allí los principales problemas y necesidades que afectan a la población de cada lugar, así como establecer las mejores maneras para resolverlos.
Como prioridades ineludibles para el accionar en este año puntualizó, además, la formación constante de los recursos humanos y el potencial científico, así como no descuidar el control e implementación de la Tarea Vida, pues el impacto climático es un riesgo real para Cuba y tenemos que hacer todo lo que esté a nuestro alcance para proteger los recursos naturales de que disponemos.
Corresponde al Citma, destacó, la misión de proponer, dirigir y controlar la política del Estado y el Gobierno en las materias de ciencia, innovación, medio ambiente y otras, que permitan contribuir al desarrollo sostenible de la nación. Unido a ello, precisó, desde este Ministerio no solo se deben impulsar las acciones relacionadas con la ciencia, sino que se debe ejercer un papel más protagónico en lo concerniente a cuestionar lo que no sale bien y alertar al Gobierno cuando eso suceda.
Y porque la ciencia, ya se ha definido en el país, resulta clave para el desarrollo económico y social cubano, el Primer Ministro reconoció, en nombre del Gobierno, el desempeño de nuestra comunidad científica en estos momentos tan complejos para la nación, en los cuales se ha potenciado el vínculo de la ciencia, la tecnología y la innovación con todo lo que hacemos.
Que se haga extensivo, dijo, a todos los que, de una u otra forma, «están pensando de una manera diferente, están innovando, están buscando cómo encontrar soluciones diferentes a los problemas que hoy afectan a la sociedad y a nuestro pueblo»».
LECCIONES Y RETOS PARA HACER DESDE LA CIENCIA
Muchas fueron las lecciones aprendidas durante 2020 sobre cómo hacer por el sistema de ciencia, tecnología y medio ambiente del país, el cual ha desempeñado un papel cada vez más protagónico en el desarrollo económico y social de la nación.
Fue ese uno de los preceptos esenciales que guio el debate suscitado en más de una docena de intervenciones, que se produjeron tras la presentación realizada por la titular del Citma, Elba Rosa Pérez Montoya, acerca de las principales líneas de acción definidas desde el Ministerio.
En medio del complejo escenario que también se vaticina para este 2021, Pérez Montoya se refirió a las nueve prioridades de trabajo para el presente calendario, entre las cuales destacó la implementación del Corredor Científico «Cuba Innova y Crece»», con vistas a fomentar la innovación e incrementar el impacto de la ciencia, la tecnología y la innovación por territorios y sectores claves para el desarrollo económico como el de los alimentos, la energía, la industria, la construcción y el transporte.
Como parte de esas acciones, acentuó, además, la transformación del sistema de gestión de la ciencia, la tecnología y la innovación; el fomento en la aplicación de los resultados de las investigaciones sociales y humanísticas en la toma de decisiones en los diferentes niveles; el fortalecimiento de la institucionalidad y el marco jurídico para la gestión del medio ambiente a todas las instancias; e incrementar el desarrollo de la informatización, con la consecuente mejora de la infraestructura tecnológica en el sistema.
Como muy complejo y de profundo crecimiento para el colectivo del Citma, definió el pasado año el viceministro del sector Armando Rodríguez Batista. El 2020 nos ha dejado la lección de la pandemia «subrayó» y será recordado como un periodo de mucho combate, en el cual también tuvimos la satisfacción del paso al frente dado por la ciencia para ayudar al país a sobreponerse a los efectos de la covid-19 y seguir avanzando.
El reto es que en 2021, enfatizó, esa batalla continúe, y no solo podamos mantener la ciencia en los lugares donde ya ha ganado terreno, sino que podamos seguir creando capacidades en todos los sectores estratégicos del país. Ello nos permite que, ante una urgencia, dispongamos de la capacidad para responder ante ella, lo cual también es parte de la función rectora del organismo.
Tenemos el compromiso, aseguró la Ministra del Citma, de perfeccionar constantemente la labor que realizamos, con un enfoque intersectorial, que permita el avance más integral en los diversos ámbitos.
A pesar de los muchos resultados obtenidos, consideró, en lo adelante el trabajo estará enfocado, esencialmente, en lo que no hemos podido hacer, basados en la aplicación de las mejores experiencias de que disponemos.
Que la generalización de los resultados contribuya más y de una manera más efectiva al desarrollo económico y social de la nación es uno de nuestros principales desafíos, concluyó Pérez Montoya.