Con unidad, sin miedo y con el pueblo, podemos vencer siempre
Hay mucho dinero corriendo, pero hay, además, laboratorios ideológicos detrás de todo esto, porque los nuevos terrenos de operación virtual y mediática han demostrado efectividad en cuanto a la manipulación y a desarmar ideológicamente a los pueblos en nuestra región y en el mundo.
(«¦) El enemigo, con sus sistemas de medios y sus mercenarios de turno, trabaja para sembrar desesperanza y desaliento. Hay que ver cómo se rasgan las vestiduras y asumen roles de víctimas o de pensadores ahora muy preocupados por el pueblo y por los trabajadores, algunos que serían incapaces del menor sacrificio por la nación, y donde nunca hablan de la verdadera causa o de la mayor causa de nuestros problemas, que es el bloqueo, al que no son capaces nunca de repudiar ni condenar. («¦)
(«¦) No olvidar que por cada uno de los que se unen en las redes, convocados por el odio, el revanchismo y el deseo de dañar a un gobierno, aunque eso signifique dañar a todo el pueblo, hay muchos más unidos en la pasión de salvarlo, sacarlo adelante y aproximarlo cada vez un poco más a la prosperidad anhelada. («¦)
(«¦) Al margen de las manipulaciones a través de las redes, del uso de medios y fórmulas que resultan efectivas para públicos sensibles y cultos, nos preguntamos: ¿Por qué han atacado nuestra cultura?
No es difícil descifrar el misterio. En Cuba, Cultura y Revolución son equivalencias desde el origen mismo de la nacionalidad. («¦)
Apuntar a la Cultura, a la fractura de la Cultura cubana, es apuntar al corazón de la Revolución Cubana, a la identidad nacional.
(«¦) El contexto es más complejo y más agresivo que nunca y no podemos ser ingenuos. Hay un enjambre anexionista queriendo que nuestro proyecto de país se venga abajo, tratando de sacar partido a nuestras escaseces y de paralizar las transformaciones en curso. La industria de la contrarrevolución mueve mucho dinero y exige acciones a los que les paga. Por eso los vándalos exhiben su violencia y los terroristas no tienen pudor en declarar sus operaciones.
El escenario del golpe suave sigue activo y la guerra no convencional busca los espacios más diversos para desatarse. Nuevas provocaciones están en curso y nuevamente las derrotaremos.
Con unidad, con coherencia, con disposición, sin miedo, con el pueblo, sin esperar orientaciones, sin demoras, con firmeza, con pulso firme, con inteligencia, con decencia, con lucidez y con apego a nuestra Constitución y a los principios que defendemos, podemos vencer siempre y cada vez de manera más contundente. («¦)
Fuentes:
Palabras pronunciadas por Miguel Mario Díaz-Canel Bermúdez, Presidente de la República de Cuba, en la reunión del Consejo de Ministros, el 16 de julio de 2020.
Discurso pronunciado por Miguel Mario Díaz-Canel Bermúdez, Presidente de la República de Cuba, en la clausura del VI Periodo Ordinario de Sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular, el 17 de diciembre de 2020.