Palmares en Caibarién por el rigor y la excelencia
Enfrascado en ofrecer un servicio que satisfaga cada vez más las demandas de sus clientes, la empresa extrahotelera Palmares apuesta por la eficacia en cada una de sus instalaciones, con total apego a las medidas de bioseguridad establecidas.
Con el inicio el pasado 12 de octubre de la etapa de nueva normalidad en Villa Clara, son varios los recintos de este tipo en la provincia que retoman de manera gradual su actividad comercial y cultural.
Destacan por sus resultados dos jóvenes centros inaugurados hace poco más de un año en la Villa Blanca, los cuales mantuvieron en los meses de enfrentamiento a la pandemia una ardua labor social con la venta a la población de alimentos listos para llevar; y que inmersos ahora en el nuevo período, reactivan varias de sus prestaciones habituales.
Uno de ellos, es el complejo recreativo cultural «Villa Blanca», compuesto por un bar especializado con bebidas y coctelería, que oferta además otros insumos y comestibles ligeros. Dicho establecimiento posee también una cafetería y discoteca, esta última detenida actualmente debido al necesario distanciamiento físico. Por otra parte, ya está abierto para los niños y sus familiares el espacio infantil «Capitán Bombón», sitio destinado a la recreación desde un parque de diversiones con venta de helados, confituras, sodas y refrescos.
Marlene Rodríguez Ramírez, jefa de turno de este complejo, asegura que, aunque ya se recibe al público joven, se mantienen las debidas restricciones imperantes aún para los centros nocturnos, así como la entrada limitada a los espacios cerrados.
Otro de los lugares bajo el control de Palmares en el municipio es la taberna «Ruinas del puerto», remozada en su totalidad en tiempos recientes, y con renovadas ofertas para los consumidores. Rolando Campos, administrador de la mencionada edificación gastronómica, declara que el menú ofrecerá no solo pescados y mariscos, sino también productos ahumados al carbón, dígase carne de cerdo, brochetas o hamburguesas. De igual forma retoman la distribución de cervezas y otras bebidas alcohólicas, con la activación del bar. El salón principal mantiene la separación de las mesas y por el momento no brinda actividades festivas programadas para los fines de semana.
Con muy buena acogida entre la población, Palmares se alista de cara al futuro y aprovecha cada minuto de la prolongada pausa de estos meses en pos de ampliar capacidades y propuestas, en la nueva normalidad y sobre todo para cuando la COVID-19 deje de existir definitivamente.
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