Luis Manuel Pérez Boitel apuesta por la poesía
Siempre apuesto por la poesía y el diálogo con los lectores. En tiempos en que un libro parece a muchos un objeto innecesario, así declara el escritor remediano Luis Manuel Pérez Boitel mientras conversa con un grupo de amigos y seguidores que esperan la presentación de sus obras en Caibarién.
Es que la Villa Blanca es su segunda ciudad, aquí siempre regresa cuando tiene en sus manos un nuevo título. Caibarién me encanta dice, entre otros motivos porque es una plaza necesaria para los escritores, este pueblo ha mantenido la tradición literaria que surgió antaño y que guarda el recuerdo de grandes como Antonio Hernández Pérez, los hermanos Oraá, Carlos Galindo y muchos otros.
Esta vez Boitel exhibe una nueva edición de su antología de poetas cubanos La isla invertebrada. Refiere que muchas recopilaciones excluyen a poetas por diversas causas, en esta suya cambia métodos en aras de mostrar la riqueza de matices de las propuestas poéticas cubanas.
Nos muestra igual de su creación el poemario Aún nos pertenece el otoño por el cual mereció el premio Casa de las Américas en el año 2002. A la editorial Capiro de Villa Clara agradece ahora la segunda edición de este título del cual comparte con los presentes poemas que emocionan dedicados a su padre.
Luis Manuel Pérez Boitel no detiene su obra literaria, agrega que sigue incursionando en la poesía porque es preciso para su andar y trabaja además con jóvenes poetas en su taller literario en Remedios.
Reflexiona con respecto a que en medio de una abalancha de tecnología y propuestas seudoculturales y de seguir estéticas en el arte y la literatura que obedecen a patrones foráneos, es importante la sensibilidad de cada persona para conocer a sus coterráneos creadores y leer sus obras, para hojear un libro, sentirlo en sus manos, ver en ellos otros paisajes que también existen y en eso radica la esencia de cada encuentro con sus lectores.
Intento hablar de premios por él merecidos como el Ser fiel, Abril, y felicitarlo pues recién obtuvo la Distinción por la Cultura Cubana, pero cambia el tema aún sin dejar de ser amena su conversación. Habla de los otros, prefiere reiterar que definitivamente reconoce a este como un pueblo culto, insiste también en la necesidad de seguir afianzando desde la familia y las circunstancias personales de cada cual, la posibilidad de reencontrarse con la poesía y la literatura en general.
Por eso a Caibarién su segunda ciudad, regresa Luis Manuel Pérez Boitel.
